LA VANGUARDIA MUSEAL

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Más que un gesto, más que una identificación simbólica, el reconocimiento oficial que otorga el Consejo Internacional de Museos (ICOM) es el objetivo vital de los museos, pues determina qué espacios pueden operar bajo esta denominación.

Generar los lineamientos que justifiquen su inclusión es una de las tareas principales de este organismo.

Esperada y polémica, la nueva definición de lo que es un Museo en el siglo XXI fue anunciada desde Praga al mundo entero por el ICOM el pasado mes de agosto de 2022. La discusión fue intensa, sobre todo por la exigencia de los distintos comités del no retiro de algunos conceptos y de la inclusión de otros.

El consenso entre más de 250 propuestas desembocó en un texto que sintetiza las principales directrices que sustituyen a las del documento anterior, emitido el año 2007:

“Un museo es una institución sin ánimo de lucro, permanente y al servicio de la sociedad, que investiga, colecciona, conserva, interpreta y exhibe el patrimonio material e inmaterial. Abiertos al público, accesibles e inclusivos, los museos fomentan la diversidad y la sostenibilidad. Con la participación de las comunidades, los museos operan y comunican ética y profesionalmente, ofreciendo experiencias variadas para la educación, el disfrute, la reflexión y el intercambio de conocimientos”.

Lograr una definición que sea precisa, un concepto general que identifique y sobre todo, deje satisfechas a todas las entidades museales es un objetivo complicado de síntesis y perspectivas.

Sin embargo, la necesidad de reconceptualizar los fundamentos del Museo se entiende por la rapidez con la que surgen espacios independientes y propuestas alternativas que “alteran” lo consensuado, sugiriendo constantemente con su presencia, nuevas revisiones.

Se trata de situaciones museales fácticas que estarían quedando de lado, sobre todo cuando en la nueva definición se resalta e incide en lo profesional y se limita a las comunidades a un protagonismo meramente participativo.

Museo Natural y Turístico de Condorcunca, Quinua, Ayacucho

Canal Museal viene identificando una serie de espacios desplegados en distintas provincias del Perú, en distritos, barrios, locales comunales, colegios, casas, etcétera, completamente sustentados en la autoformación de sus responsables y en la autogeneración de todos sus contenidos y recursos, tanto económicos como materiales.

Son núcleos pequeños pero sin duda poderosos, y que a raíz del dedicado esfuerzo de sus creadores logran un impacto social y cultural de gran trascendencia al interior de su comunidad.

No cuentan con el amparo del ministerio a cargo, al contrario, su existencia es una lucha constante contra el menosprecio oficial y las actuales (y posiblemente futuras) exigencias legales que imposibilitan su desarrollo.

Se trata de La Vanguardia museal.

Casa Museo Leoncio Maguiña Morales, Aija, Ancash

PEQUEÑOs ANTECEDENTEs

En 2017, junto a Teresa Arias Rojas tomamos la decisión de crear y ofrecer a través de las redes sociales una plataforma laboral propia e independiente a la que llamamos Canal Museal. El objetivo era contar con un espacio mediante el cual pudiéramos volcar y difundir, sin rendir cuentas a nadie, lo aprendido durante nuestra experiencia en galerías, museos y otros espacios de exposición e investigación peruanos.

Quizás elegimos el camino más difícil, pero hoy ¿qué rutas independientes no representan una solitaria lucha por existir y mantenerse a flote, empecinadas en crecer de forma constante y diversa en un medio mayormente adverso?.

Ocurre que no solo es gestar, también es mantener. Quizás sea a través de este escenario que nos sentimos identificados con La Vanguardia Museal y una de sus más importantes enseñanzas: es preferible actuar, que esperar por algo que quizás nunca llegue.

Museo Catalina Huanca, Pilcomayo, Huancayo

MI VANGUARDIA

La decisión de independizar nuestra labor, aunada a diversos viajes y a los nuevos contactos que aquellos desplazamientos implicaban, nos permiten hoy detectar en un primer informe de campo una serie de espacios museales que revelan situaciones radicalmente distintas a las que suelen atravesar y proponer los museos “oficiales”, es decir, aquellos reconocidos por las entidades a cargo y más recientemente, por la nueva definición del ICOM.

Cada uno de estos escenarios, que encontramos dispersos en distintos puntos del territorio peruano, resguardan grandes historias que merecen ser conocidas, así como ciertas características en común que es necesario reconocer.

Acercarnos a sus motivaciones quizás nos permita entender el porqué la pugna por mantenerse y persistir, el para qué formar parte de las instituciones museales oficiales aún conociendo la crítica situación que atraviesan las entidades gubernamentales a cargo, y esto a la vez, nos deje conocer a fondo la situación general por la que atraviesan los museos peruanos.

Decididos a identificarlos, tenemos una denominación: La Vanguardia Museal, pues ante nuestros ojos configuran el futuro de los museos en el Perú. Su existencia es una respuesta casi subversiva al menosprecio y a la falta de espacios culturales precisamente allí donde se debiera incentivar y promover su creación.

Foto 1: Museo Escolar del Colegio Túpac Amaru, Pozuzo, Pasco | Foto 2: Museo Escolar de Nivín, Casma, Ancash. | Foto 3: Museo Away Wanca, Huacrapuquio, Junín | Foto 4: IE Pampas Canto Grande, San Juan de Lurigancho

Desde lo civil y lo particular son espacios a la delantera de las determinaciones necesarias para que el concepto de “museo” no desaparezca ni se aleje de sus objetivos, ni de aquella “nueva ciudadanía orgullosa de sus raíces” que surge como una necesidad y proyecto al interior de las comunidades.

Protegidos por una poderosa “mística” que los impulsa, estos núcleos museales reúnen conceptos y recursos que, con limitaciones y todo, nos ofrecen la posibilidad de encontrar nuevos caminos, experiencias y soluciones.

Historias distintas, respuestas e interrogantes al mismo tiempo, miradas curiosas que nos invitan a ver nuestro entorno a través de las suyas. ¿No es este el gran tema de los museos?

Foto 1: Museo Casa del Caminante, Jauja | Foto 2: Museo Campaña de la Breña Pucará, Huancayo | Foto 3: Casa Museo Leoncio Maguiña Morales, Aija, Ancash

EL PRIMER INFORME

Todos los objetivos irradiados desde el concepto general de Museo se concentran en La Vanguardia Museal, se humanizan hasta convertirse en un llamado de atención para que no ignoremos sus propuestas y es más, prestemos mayor respuesta a sus necesidades. Las definiciones son limitadas y relativas y si no se resuelven en un documento lo serán en nuestro sentir más profundo y honesto.

En base a una serie de características compartidas, Canal Museal intenta y plantea una primera nómina de lineamientos que nos permitirán determinar su ubicación y seguimiento para un mejor estudio y sobre todo, colaboración.

Este es nuestro primer documento de trabajo sobre el tema. Lo hemos dividido en tres sectores: ESPACIOS ACTIVOS IDENTIFICADOS, en una nómina actualizada a octubre de 2022; LINEAMIENTOS DE LA VANGUARDIA MUSEAL: LOS ESPACIOS Y LOS PROTAGONISTAS; LAS NECESIDADES DE LA VANGUARDIA MUSEAL; y LO QUE NO NECESITA LA VANGUARDIA MUSEAL.

Foto 1: Museo Musuq Kausay, Llocllapampa, Junín | Foto 2: Museo de la Marioneta, Cajamarca


LA VANGUARDIA MUSEAL

ESPACIOS ACTIVOS IDENTIFICADOS
(Nómina actualizada a octubre de 2022)

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LINEAMIENTOS DE LA VANGUARDIA MUSEAL:
LOS ESPACIOS Y LOS PROTAGONISTAS

  • Sus fundadores/promotores son en su mayoría autodidactas en el tema museográfico
  • Son espacios que no están registrados como museos en el Ministerio de Cultura – MINCUL
  • Realizan su propia museografía
  • Realizan su propia curaduría
  • Sus creadores han construido el edificio para su museo mediante financiamiento propio
  • Sus creadores han “entregado” su casa para transformarla en museo
  • Si fallece su creador el espacio pasa a ser impulsado por el o los herederos que poseen mayor motivación e interés en el patrimonio, el arte, la historia y la cultura de su localidad
  • Son espacios cuyas puertas están abiertas tanto a la comunidad como a los visitantes foráneos
  • Su mobiliario museográfico ha sido construido y diseñado por ellos mismos
  • No cuentan con el apoyo de instituciones públicas o privadas
  • Editan e imprimen sus propias publicaciones
  • Realizan su propias catalogaciones e inventarios
  • Sus promotores logran crear ambientes que siempre transmiten sensaciones, las cuales finalmente resultan en experiencias museales que permanecen en el recuerdo
  • No aparecen en los circuitos oficiales y escasamente en los regionales
  • Son espacios manejados por una sola persona
  • Sus promotores se actualizan, tratan de informarse y de participar en talleres, cursos, etcétera
  • Buscan constante asesoría con los especialistas que logran visitar sus museos
  • Hay uno o varios docentes escolares vinculados o brindando su asesoría al museo
  • Son excéntricos: sus ejes y núcleos guardan su propia lectura y despliegue
  • Son arriesgados, tienen osadía a la hora de plantear sus contenidos
  • Buscan de forma constante el facilitar al visitante el muchas veces difícil acceso a su local
  • El espacio y propuesta son heredados
  • No viven de sus ingresos
  • Funcionan con presupuesto propio
  • Son menospreciados por los funcionarios estatales de turno
  • Escasos investigadores y académicos conocen sus colecciones, su potencial y riqueza social
  • Poseen un intenso sesgo educativo
  • Originan distintas preocupaciones museales sobre la conservación de sus objetos, su mantenimiento, etcétera
  • Son considerados “potencialmente peligrosos” para la conservación y exhibición de sus colecciones
  • Permanentemente esperan “algo” del Estado y del ministerio a cargo del sector
  • No suelen cambiar de propuesta ni de concepto, son espacios museales que se mantienen constantes en su planteamiento original
  • Puede obtener cierto apoyo a través de algunas Direcciones Desconcentradas de Cultura – DDC’s
  • Producen su propio merchandising
  • Su rigurosidad histórica se basa en lecturas, publicaciones, investigaciones reconocidas, propias y locales
  • Su colección puede correr peligro por diversos factores, entre ellos el ambiental
  • Logran ingresos mediante el alquiler de su local para diversas actividades sociales
  • Son estigmatizados, sin embargo, no se rinden y sortean los problemas de manera práctica

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LAS NECESIDADES DE LA VANGUARDIA MUSEAL

  • Necesitan mayor participación en encuentros museológicos y de turismo
  • Requieren de ingresos constantes
  • Necesitan el diagnóstico, así como la conservación y restauración de muchas de sus piezas
  • Una catalogación e inventario de sus colecciones
  • Requieren de asesoría para catalogar e inventariar según modelos oficiales
  • Difusión de sus planteamientos y actividades
  • Reconocimiento oficial
  • Planos de sus salas y áreas
  • Registro fotográfico de sus colecciones
  • Impresos con su historia, misión, lineamientos, contenidos y mapas de acceso
  • Protocolos de organización y de funcionamiento
  • Un sitio web
  • Presencia en las redes sociales
  • Presencia en ferias de museos a nivel nacional
  • Afianzar redes regionales de apoyo mutuo
  • Establecer alianzas con instituciones privadas

LO QUE NO NECESITA LA VANGUARDIA MUSEAL

  • Una museografía o curaduría ajena
  • Leyes que impidan su funcionamiento
  • Confiscación de sus colecciones

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2 comentarios en “LA VANGUARDIA MUSEAL”

  1. Pingback: LEONCIO MAGUIÑA MORALES . PINTOR DE AIJA- Primer Trailer

  2. He querido encontrar una mejor palabra que santuario para referirme a museos y no la halló. La originalidad y esencia de los museos no debe ser politizada, ni disfrazada, por lo tanto la solvencia económica para su manutención debe ser sin lazos ni manipulaciones. Que reine su autonomía.

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